Pasadas las navidades, cansados de disfrutar de comidas más sofisticadas y con el cuerpo todavía con las últimas resacas de Reyes, hemos vuelto a la comida casera y tradicional. Para ello he preparado una morcilla de burgos frita con almendras y otra con nueces, para ver cual nos gustaba más y la opinión general ha sido que las dos están muy buenas, pero a la mayoría le ha gustado más la de almendras. Es una nueva forma de comer la morcilla de burgos de forma más original y presentada. En Salamanca comemos la morcilla de piñones y cebolla y está buenísima... pero ésta con almendras tampoco tiene desperdicio. Recomiendo probarla.
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